martes, 17 de agosto de 2010

Descubrimiento nuevo

Creo que sólo escribo aquí cuando me siento o muy bien, o muy mal, o muy extraña... Hoy me siento muy extraña. Bueno, en realidad no sé, es como una mezcla de desesperación, tristeza, melancolía, aburrimiento, fastidio, coraje, insatisfacción. Me dan ganas de gritar, correr y sin embargo estoy aquí, sentada frente a esta vieja y lenta compu, que últimamente se ha convertido en mi confidente y cómplice.

No sé porqué amanecí así... o tal vez sí. El caso es que tenía ganas de escribir algo... tenía ganas de escribir esto, (es algo que leí en ese libro que sabes estoy leyendo):


"Mi carga es pesada. Trabajo para su liberación. Y también para la mía propia. Pero yo no soy un Breuer: yo entiendo mi sufrimiento y lo acepto de buen grado. Y Lou Salomé no es una lisiada. ¡Pero sé lo que significa ser asediado por alguien a quien amo y odio!"

Leí la última frase y fue inevitable acordarme de ti y sonreír. Por eso no puedo platicarte sobre el libro... porque habla de ti... te pareces tanto a él... te pareces tanto a Nietzsche. ¿Cuándo será el día que llores?


1 comentario:

Chipi Chipi dijo...

Hermosa!!
que terrible, me siento brutalmente identificada con lo que has escrito, quizas porque a veces siento que tambien, algo una tremenda catarsis con el blog y por eso paso en momentos de suma intensidad emocional, ya sea algo bueno o algo malo...
A mi tmb hoy por hoy ciertas cosas aun me recuerdan a ....y coincido mucho con tu ultima frase...
Un abrazo