Sólo en México

Ok. Empezaré por el principio. Me levanté temprano, y cuando me estaba bañando se fue la luz, sí, justo hoy, el día que tenía que ir a reclamar a la compañía de luz que el recibo llegó así o más caro?

Salí de mi casa y llegué al recinto donde minutos después estaría a punto de derramarse mi bilis. Entré y como no sabía por dónde ni con quién, fui a una mesa donde había un señor policía y le pregunté:

Yo: Buenos días, disculpe, para aclaraciones ¿dónde me formo? (o sea así o
más educada la niña loser?)
Poli: Pero aclaraciones de qué o qué?
Yo: [saqué mis recibitos] Es que no sé porqué en éste nos cobran así y en el
otro así...

Y bueno, intenté explicarle lo que no entendía. Obvio ni yo le entendí, ni él me entendió.

En eso, que llega una señora de lo más gorda y se sienta al lado del poli.

Poli: [dirigiéndose a la gorda] Mira, fíjate que no entiende porqué le

cobran así..
Gorda: ¿Cómo que no entiende? (qué es estúpida o qué?)
Yo: Pues verá, en este recibo... shalala, shalala...

El punto es que de un promedio mensual, si te pasas de los 250, ya valiste verdolaga, porque te cobran más del doble que si tu promedio fuera de 249 o menos.

Yo: Ajá, pero por ejemplo, en éste [señalando el recibo viejo] tuvimos 257 y nos cobran menos que en éste [señalando el actual] que tuvimos 251.

Gorda: ¿Y eso qué? ¿Que no sabías que la luz sube cada bimestre? (claro, como la gasolina, el huevo, las tortillas, el pollo, las medicinas, el arroz, el frijol, el jitomate, la cebolla, el aguacate, la carne, el pescado, el aceite, la harina, la leche... ay pues sí, qué bestia soy)

Yo: Ah ok, pero y por qué entonces el promedio...

Y aún no acababa la pregunta, cuando fui taradamente interrumpida por el poli, con con una respuesta clara, que no era la que buscaba, pero que fue la que hizo nuditos mis intestinos.

Poli: Porque Fox lo dijo.

Pum! Y valió. Mi cara fue de... no, no sé de qué fue, pero la satisfacción del poli era tanta, al echarle la culpa de mi frustración a uno más bruto que todos los que estabamos ahí reunidos... que con eso bastó.

Y la gorda habló y ya no sé qué dijo, porque en eso yo sólo dije, ok gracias , y me salí, haciendo caras, mentando madres y al borde de esas lágrimas corajudas que me acompañan en situaciones como ésta.

Caminé, y me formé en la fila de pago. Mi cerebro procesando diez mil cosas y mi estómago revolviendo coraje. A fin de cuentas, esos pobres trabajadores qué culpa tienen. Me cayeron gordos y los odié... pero... he estado casi 6 meses en el gobierno. Sé lo que hace la gente ahí. Sé que no es feliz, que no trabaja con ganas, que no le gusta lo que hace, que no crece, no se supera, no le dan la oportunidad de ir más allá, y se vuelven conformistas, apáticos, amargados, mañosos... Y viven por vivir, trabajan por trabajar, porque tienen que vivir de algo, porque tiene que comer... Y dije... no, a la goma, trabajar en el gobierno no es para mí, prefiero vender jugos.

Y todo eso iba pensando cuando a dos personas de llegar a la caja (ah, porque deben de saber que de 4 cajas, sólo 1 estaba abierta), dice otro poli...

Poli: hasta donde llegue la pila de la compu señores...

Claro. No había luz y la computadora de la caja estaba funcionando con el regulador, que quién sabe cuánto duraría... Y yo, inconsientemente, solté la carcajada.

O sea, ¿se va la luz en la compañía de luz? Es el colmo de los colmos. Como el del jorobado que estudia derecho y esos chistes ni tan chistes. Y eso SÓLO EN MÉXICO.

Y para fortuna de mi salud física y mental alcancé a pagar. Y salí de ahí mirando lastimeramente a las decenas de personas que estaban formadas, sin saber que no había luz y que no les iban a cobrar nada, que sólo perdían su tiempo.

Y ya, aunque ya pasaron como muchas horas de mi coraje, y el día y la vida siguió, y las cosas toman su curso, quiero escribir esto para que quede claro que ya, en definitiva, por mí, el gobierno, Calderón, los altos funcionarios, las secretarías, el congreso, y todos esos que no trabajan por nosotros pero que cobran como si nos dieran masaje diario en los dedos de los píes, uno por uno, se pueden ir mucho al diablo, a la gadachin y a lugares que ya saben ustedes, pero que no escribo por consideración a algunos lectores de mi blog. Estoy harta y si hay revolución para eliminar a todos los de arriba ( y todos son todos, ya dejé los favoritismos) pues cuenten conmigo señores conspiradores (que espero en algún rincón de este absurdo México exista alguien que piense en actuar).Y eso sólo con la luz... por eso ya no veo las noticias... Y ya me voy, porque si sigo así haré mi tesis del día que fui a reclamar a la compañía de luz....